Estrenamos la primera canción de «Bremen No Existe» (Montgrí, 2022), el cuarto disco de estudio de Biznaga.
Contra mi generación es una canción de amor frustrado contra esa forma de identidad colectiva, siempre difusa y conflictiva, que supone lo generacional. También un ajuste de cuentas con nosotros mismos, que busca la confrontación en el espejo retrovisor de las expectativas generadas por los futuros perdidos, en un momento límite en el que las categorías “todo” y “nada” parecen especialmente confusas. Musicalmente suena directa, pero sin renunciar a cierta emocionalidad sustentada por el juego melódico de voz y guitarras, que podría remitir al «college rock» norteamericano de mediados de los 80.
Estamos delante de un nuevo sonido Biznaga que une, mejor que nunca, lo antiguo con lo moderno. La nostalgia por las guitarras de antaño con la pegada del siglo XXI. Como decía la banda de rock más grande de todos los tiempos: Todo lo que digáis que somos, lo somos y aún peor.Biznaga comulgaría con ese lema si no fuera porque les importa una mierda eso del rock.
Siendo parte de una generación de músicos formados alrededor del punk, Biznaga se han erigido como uno de los más firmes candidatos a traspasar las fronteras siempre difíciles entre este género y el gran público. De una manera muy personal han conseguido perfeccionar, a base de melodía, discurso y actitud, una suerte de canción protesta contemporánea.
Sus tres trabajos publicados hasta la fecha: Centro Dramático Nacional (Holy Cuervo, 2014), Sentido del Espectáculo (Slovenly Recordings, 2017) y Gran Pantalla (Slovenly Recordings, 2020) son buena prueba de cómo desarrollar una trayectoria a base de grandes canciones, sin concesiones en lo retórico, ni renuncias en lo melódico.
MONTSE CARREÑO