Antes de comenzar con esta reseña, tenemos que pedir disculpas públicamente por la tardanza, ya que es culpa enteramente mía, por estar liado con mil y una historias laborales, y aunque no sea excusa, es obligado sobre todo porque esta santa casa donde publicamos esta reseña, no es de los medios que tarda en hacer público las crónicas de conciertos. Después de esta auto bronca hecha, de manera justa, nos vamos a centrar en hablaros de esta noche de salvaje rock and roll, con tres bandas que me alteran la sangre, la hacer hervir de manera brutal. De cabeza de cartel Porco Bravo siguen siendo una de esas bandas que, en nuestro país, son pura adrenalina, rock and roll sudoroso, crudo y sangriento, heredero de bandas como los Stooges, Motorhead y otras de nuestro país como La banda Trapera del Rio , una animalada en definitiva que te enganchan y no te sueltan.
Antes de la descarga de «el porco», tuvimos la presencia en el escenario de otras dos bandas a las que yo tengo especial cariño, como son el caso de Aulladores que fueron los primeros en subirse al escenario, y que me siguen encantando, por ese sonido tan crudo donde uno encuentra, por un lado, influencias como Motorhead y sonido de Garaje, que ya he comentado otras veces al hablar de ellos. Su actitud es puramente punk, y son un puñetazo en la cara. ¿Inconvenientes de su propuesta musical? Personalmente no les veo ninguno, ya que su sonido es crudo y callejero, pero es verdad que hay cosas que tienen que pulir, y que poco a poco, han ido haciéndolo en muchoEEs aspectos, pero lo que sí tienen que incidir, a mi parecer, es que sobre el escenario siguen estando muy estáticos, (tampoco queremos que hagan doble salto mortal en el aire o similares) pero es verdad que eso quita un poco dinamismo a su actuación, aunque lo que habla de ellos y por ellos, es la música. No nos sorprendieron en cuanto al set list, ya que los hemos visto un buen puñado de veces, pero eso no quita para que disfrutemos de temas de sus dos discos así que andanadas como «Tiempo» , «Víboras» o el que da nombre a la banda «Aulladores», nos hicieron pasar un fantástico rato. Hay que apoyarlos, se lo merecen.
Otros que no paran de tocar en los escenarios de nuestro país, son Las Cheerleaders Asesinas que tienen un potentísimo directo, de los que te vuelan la cabeza en mil pedazos, ya que son pura energía en el escenario y su segundo disco «Sin domesticar» es realmente una pasada a nivel musical, ya que saben combinar bien todo lo que es ese metal más ochentero, con el que muchos hemos crecido con esas guitarras que suenan a los legendarios AC/DC, chutes de electricidad a la espina dorsal, sin olvidarnos del buen hard rock y la actitud punk, que nunca puede faltar. Me sigo quedando con este segundo trabajo (sin menospreciar con esto el primero) que me parece mucho más rematado, y sobre todo, en donde se ve una evolución musical a mi parecer muy grande. “Hielo Caliente» me pone muy cachondo, rock and roll vacilón, para hacer mil y una guarradas, para pasar una noche salvaje de sexo entre las sábanas. «Calibre 32» es un cañonazo que te destroza, al igual que «Nicotina» que nos hace saltar y cantar sin parar. Tampoco pueden faltar temas de su primer disco, así que el metalero «R NR Guerrilla» destroza nuestros cuellos sin piedad, o la salvaje «Lady Anfetamina». Una brutalidad de banda, mires por donde lo mires.
Teníamos ya ganas de poder ver al Porco en nuestra ciudad, y desde luego, se disfrutó de manera intensa, la mejor manera de poder sentir el rock, el sudor y la adrenalina es en salas como Gruta 77. Tienen nuevo disco, con temas que no desentonan para nada con los temas de su anterior disco, pero me pasa lo mismo que con las Cheerleaders y Aulladores, creo que con este nuevo trabajo, han evolucionado muchísimo, y puedes encontrar muchos detalles y pinceladas musicales, que dan mucho más que color. También, hay que decir que esto no quiere decir que nos falten las «embestidas musicales» ya que «Animal» te pone aceleradísimo, es de esos temas que te hace hervir la sangre, o «la Ley» con una buena combinación de guitarras, que te pueden recordar a bandas de metal más ochenteras y clásicas, como Judas Priest que suenan afiladísimas, pero lo que prima es ese sonido sucio, que está a mi parecer, más entroncado con el punk o bandas de rock escandinavo, y que también, nos han marcado a muchos como Backyard Babies o Turbonegro (a los que estarán abriendo en sus conciertos por este país en Diciembre, y que seguro, les harán sudar tinta ya que el Porco a mi parecer se los van a comer ). «Corre» es pura libertad, otro temazo que es banda sonora para la calle, y que me pone los pelos de punta. «No sé» es rock and roll desquiciante y acelerado, mira que me gusta al igual que «Lemmy»(una banda que dedica un tema a Lemmy no puede ser nunca mala). Tampoco faltaron temas de su disco anterior «Groo» como «Lascivia» donde el mismo Robertez (William Folkners) se subió a colaborar, con ya hizo en la versión de estudio del disco dándonos otro momento salvaje para añadir a la noche. Increíbles es poco, así que vamos a verles abriendo para Turbonegro, ya que ellos van a ser «El cazador».
Texto y fotografías: Charly Rock And Roll