Emergentes en ebullición
Que las bandas emergentes lo tienen crudo y duro, es un hecho de primer orden que no se le puede escapar a nadie. Al rechazo del gran público en general, que no suele hacerse mucho eco de su presencia, hay que sumar el desinterés de muchos medios empeñados en ensalzar a las viejas glorias, para desempolvar sus fondos de armario. Y por último, el desprecio absoluto de los programadores de grandes festivales, que no ven en ellos, nada absolutamente. Pues yo, personalmente, creo que habría que crear espacios para estos grupos, darles un motivo más para que cada día la ilusión se acreciente, una razón para que se sientan valorados, un apoyo explícito y real, para que esta semilla germine vigorosa, dándonos todo su fruto. Tan sencillo como poner un escenario dedicado solo a bandas emergentes. Ya tenemos espacios para los grupos tributo, para el Grow, para el mercadillo, incluso para la música étnica y el hip-hop, que con todo el respeto y admiración, no sé qué papel juegan en un festival dedicado al rock, por delante de estas bandas emergentes. Vamos a darles su espacio, que estoy seguro que va a ser todo un éxito.
Nadye es una banda que se formó en 2.007, y que consiguió vender mil copias de su primer disco producido por Iker Piedrafita. Es un gran acierto. En esta ocasión, presentaban su tercer trabajo en estudio “El Último Minuto”, un disco que han grabado y producido en su propio estudio de grabación “La Caverna”, y que tiene un contenido mucho más sugestivo que sus anteriores trabajos. Rock directo, contundente, pero enraizado con las grandes líneas melódicas del rock de todos los tiempos. Su último disco, les ha proporcionado todas las cartas para ganar la partida, lo que demuestra que su evolución va por buen camino. Quisieron convocar a sus fieles en Madrid, para mostrar el avance de su talento, y para disfrutar de una de esas noches mágicas que pueden hacerte sentir muchas buenas vibraciones.
Abrió la noche Deskarte, una jovencísima banda que se fundó en 2.010, y que solo tiene un disco publicado hasta la fecha “Para Que Tiemblen Tus Pestañas”. Siempre es duro abrir los conciertos, con el público fuera de juego y entrando aún en la sala. Pero la vitalidad de Deskarte pudo con todo eso y con mucho más. Se dedicaron a disfrutar del bolo con entrega y mucha pasión, desgranando los temas de su disco, y de su anterior maqueta. Mucho rock urbano, rocanrol a cara de perro y energía desbordante.
Por su parte Nadye, los protagonistas de la noche, no quisieron dejar nada para el recuerdo. La vigencia de su particular brío, sirvió para calentar el ambiente. Abrieron con “El Último Minuto En La Tierra” el corte número cinco de su nuevo disco, y siguieron con “Perdido” “Tú Garganta”, “Olor A Sal”, “Con El Viento A Favor” y una versión muy aguda de “Son Ilusiones” de Los Chichos. Tienen un directo brutal, con mucha implicación por parte de toda la banda, que se deja la piel y el sudor en expresarse, en experimentar esa pasión insolente que te obliga a vomitar tus sentimientos. Prosiguieron con “Hoy”, “Contigo”, de su segundo disco, “Imparable”, “La Cuenta Atrás”, “Volver” y “A La Deriva” de su nuevo disco. El show fue creciendo en intensidad, y el público, acabó rendido y extasiado con la banda, que casi se desmembró en su obsesión por entregarlo todo. No se puede pedir mucho más. Solo se puede agradecer sinceramente, que entregan tanta vida y tanta energía a hacer nuestras vidas mucho mejores con su música. Se fueron a los bises con una versión de Raphael, “Como Yo Te Amo” que, sinceramente, es cuanto menos curiosa. Y terminaron como habían empezado, arrimando el hombro, trabajando con eficacia y consiguiendo que el público flipara. Buen trabajo.
CHEMA GRANADOS