LA TIENDA DEL TIEMPO. SALA BOITE. MADRID

Resulta muy difícil enmarcar dentro de cualquier estilo, a bandas que saben circular con maestría por ámbitos diversos, y no perder ni una pizca de su propio carácter e idiosincrasia. Además, cuando el trabajo resulta resolutivo y bien formado, se da forma a un producto único y característico. Esta es la resolución de una banda como La Tienda Del Tiempo, una formación de reciente creación, y que intuyo que con este primer disco editado hasta el momento, han encontrado el sentido de su música. No seré yo quien juzgue el estilo, para enmarcarlos en este o aquél redil, porque la música es música, y conlleva transmisión de sentimientos y de sensaciones. Tiene mucho que ver con el afecto y las emociones. Así es que habrá a quien le suene a pop mediático, a quienes les suene a rock elegante y melódico, y a quien le produzca rechazo. Así es este oficio. En cualquier caso, yo que soy un melómano de pro, acostumbrado a juzgar con mis criticas el trabajo de muchos compañeros, solo quiero hablar de sensaciones, de emotividad, porque lo demás, son solo juicios de valor, y yo no soy quien para juzgar, y máxime, cuando detrás de cada proyecto hay grandes dosis de ilusión, de entrega, de desdoblamiento emocional. El caso es que La Tienda Del Tiempo se presentaron en Madrid, en la Sala Boite, sita en el corazón de la ciudad, para mostrarnos un puñado de canciones resolutivas, transparentes, cargadas de lustre acústico, que deleitan por su melódica perspectiva bien entendida, y por esa elegancia sutil en el tratamiento de las armonías. La banda la componen  Nacho Ruiz (Guitarra), Charly Rodríguez (Guitarra), Toni Lozano (Voz y guitarra acústica), Alex Morell (bajo), Daniel del Val (Batería), todos músicos de entidad, que han sabido dar forma a un proyecto que, sin duda, va a tener un recorrido muy largo si saben canalizar sus fuerzas y gestionar su talento convenientemente.

Abrieron en concierto con el tema “Al Otro Lado Del Espejo” el quinto corte del disco, un medio tiempo rumoroso con el que fueron creando el clima más adecuado para que el público se fuera haciendo al sonido de la banda. Continuaron con “La Tienda Del Tiempo”, “Quiero Vivir”, “Buscando La Luna Llena”, “Mariposa” un tema de nuevo cuño, “Dulce Veneno”, y “Muero Por Tu Piel”. Aunque el público se mantuvo
algo dubitativo y expectante, no le costó mucho esfuerzo entrar y participar del show gracias a la habilidad de la banda para encandilarlos. Continuaron con “La Mujer Más Bonita Del Mundo”, “Te Esperé”, “Piezas” y “Sin Pensar” un tema que no está en el disco. Un set list cargado de intencionalidad que hizo brillar al grupo y que acabó por convencer de todo su potencial. Un potencial, que sin lugar a duda, se verá incrementado por el paso del tiempo, el desarrollo propio del tándem y la llegada de nuevas composiciones. Desde esta tribuna, les deseo fervientemente una larga carrera, que merecen por derecho propio.

CHEMA GRANADOS