INCONSCIENTES + CERO A LA IZQUIERDA. SALA PENÉLOPE. MADRID

Inconscientes recalaron en Madrid para presentar su nuevo trabajo discográfico “Quimeras Y Otras Realidades”, un disco de rock & roll básico, enredado en un laberinto de riffs elípticos e hirvientes, donde hay un espacio para la pasión más desenfrenada, y para ese lenguaje que el alma entiende tan acertadamente, el lenguaje de la autenticidad. Los que ulteriormente se denominaron la Inconsciencia De Uoho, han vuelto a retomar su actividad con un nuevo disco y un puñado de canciones donde la excelencia rockera es el vínculo de unión entre ellas. Por tanto, la expectativa era importante, hasta el punto que la banda se vio obligada a colgar el cartel de sold out. Una buena noticia para el rock estatal, ya que ese mismo fin de semana se contabilizaron en la capital del reino, cinco sold out, entre ellos los de Lendakaris Muertos y Porco Bravo, o Sôber en la Riviera. Esperemos que esta tónica anime al público a asistir a más conciertos, y a dar una oportunidad a nuestra cultura. Por tanto, con las expectativas ardiendo, y mucho interés por ver de nuevo a la banda, la noche parecía estar teñida con ese color placentero que anima a la ilusión, y que despierta en nuestro interior un deseo incontrolable de rock & roll. Y las expectativas no solo se cumplieron, sino que se vieron sublimadas por el despliegue de recursos y la potencia de las dos bandas, que cumplieron con su trabajo de una manera magistral.

De entrada, y desde Pamplona, ejerciendo de maestros de ceremonia, aparecieron sobre el  escenario Cero A La Izquierda, una banda de jóvenes pamplonicas con muchas agallas y una actitud que dejó pasmado al personal presente. A pesar de la edad (entre 21 y 24 años) ya llevan más de 140 conciertos por todo el país, y tres discos publicados, el último de ellos “Campo De Minas” editado el año pasado. Desplegaron todo su encanto desde el minuto uno con “Crupier Fortuna” el tema con el que abren su último disco. Un tema contundente y enérgico que inundó el ambiente de explosivos acordes. Siguieron con “Huellas”, “Vale La Pena” y “Va A Temblar La Tierra” temas de su nuevo trabajo. Mucha resolución en el escenario, con Sergio Pérez evolucionando por el mástil de su guitarra con coraje, y la base rítmica de Dani y Lucas asfaltando con su métrica el sonido, y tras esa contundencia, la voz agrietada de Javi Robles, muy resuelto sobre las tablas. Ofrecieron un show de categoría, con un sonido coherente y bien empastado, lo que les ofrece un futuro inmejorable. Terminaron con “Mis Lamparones” de su disco “No Ha Dejado De Llover” dejando una imagen inmejorable y su impronta en el público.

Minutos después los acordes de “Otra Realidad” provocaban la marea entre el público, y el electrizante movimiento de Iñaki Antón Uoho nos embargaba. Inconscientes son una banda con un público fiel en Madrid, que les estima y les apoya. Y me consta que no tanto por ser sus miembros parte y arte de Extremoduro, a excepción de Jon claro, sino porque el repertorio de canciones tiene identidad propia, y este merito les convierte en una banda muy valorada, al margen de celebridades. Así pues, puede asegurar que lo que vivimos fue un auténtico vendaval de rock and roll, con un Inaki Uoho en estado de gracia, y una banda que suena como un cañón. Se aprecia la experiencia, pero también, ese deseo por encontrar nuevas referencias para crear canciones que vayan más allá. Continuaron con “Arden”, “Tendrá Que Ser Otra Vez”, “Detrás Del Universo”, y “Como Has Perdido Tu”. La sala entera vibrando, entrado el público a una especie de delirio invisible que pareció apoderarse del personal cada vez más motivado. Y como no, referencias a Platero Y Tu, con el tema “Voy A Acabar Borracho”. Continuaron con “No Te Detengas”, “Una Vez Más” y “Eterno Viajero”, “Una Vez Más”, “Dentro De Una Botella”, las celebradas canciones de su primer disco, y ya en el tramo final “Cacareo”, y la última referencia de Platero, “Hay Poco Rock & Roll” como un grandioso colofón a una noche inolvidable. Lo que si dejaron meridianamente claro es que Inconscientes son una banda poderosa, grande, con ímpetu propio, y no una sucursal de Extremoduro. Saben tejer emociones, encumbrar sueños, y ofrecer aquello que más nos excita y apasiona, rock & roll sin envoltorios ni eufemismos absurdos.

CHEMA GRANADOS