Quinto disco para los hijos de Vallekas, Antigüa, una de las formaciones más implicadas en ahondar en el rock clásico, para revestirlo con sus mágicas ínfulas de modernismo reposado y consecuente. En esta ocasión, han publicado el disco de la mano de la discográfica Rock Estatal Records, aunque Juan Olmos mantiene su trabajo como productor como en los discos anteriores, al igual que la masterización, realizada magníficamente por Jesús Arispont. Doce cortes donde hay muchos destellos de su genialidad acumulada a lo largo de sus anteriores trabajos, pero también, hay espacio para la introspección, y para encontrar nuevos senderos donde refrescar su argumentario musical. A pesar de todos los cambio en la formación, que siempre desequilibran cualquier formación, Juan Olmos siempre ha sabido encontrar la manera de encauzar el proyecto una y otra vez. Y esta vez, no podía ser menos. En esta ordalía frenética es que se convierte una banda de rock, y en unos tiempos infames donde la música es ninguneada por gran parte de una sociedad corrompida, mantener a flote cualquier proyecto requiere mucha fe y mucha pasión.
La grata realidad es que están aquí, con este nuevo disco “5.2” mirándonos directamente a los ojos, para proclamar su mensaje a través de estas canciones directas y cargadas de energía. Muchas de ellas reflexivas, otras incisivas, y algunas más de denuncia social preclara. Canciones que deben ser escuchadas de forma reposada, con ánimo de encontrar los mensajes ocultos, y todos esos registros magistrales que Antigüa saben imprimir en todos sus discos. Como fan de la banda, desde mucho antes de que se concibiera el proyecto, cuando aun estaba en la mente de Juan Olmos, y solo era una idea que le rondaba la cabeza, es muy difícil una valoración de este nuevo disco al margen de la pasión y afecto que siento por ellos, y como no, de la amistad. Pero desde este punto de vista, sí que puedo decir que me ha sorprendido por su intento de buscar registros mas allá de Antigüa, de renovarse, de hallar las respuestas a las incógnitas mas oscuras, a base de entrar en un espacio muy diferente a los anteriores discos.
Hay temas clamorosos como el single “Papel Mojado” que emociona y que mantiene el sabor propio, pero también muchos medios tiempos, donde se dejan deslizar por un espacio de introspección fantástico como “Un Suspiro Es Todo El Tiempo” un tema de un feeling exquisito, o “Trigo Limpio” en esta misma onda. Y luego temas intimistas con redaños mucho más profundos como “El Rey De La Comedia” o “Siempre Sonreiré”. Y como no, los temas que tienen esencia propia, como “Caí En La Red”. En definitiva, un trabajo impecable, intenso y emotivo, que espero y deseo sea apreciado en su justa medida. Antigüa resumen en su música muchos de los valores auténticos del rock & roll, y subrayo “auténticos”, valores de verdad, sin travestimos ni postureo. La experiencia y la lucha por la subsistencia en esta jungla llamada rock, están en cada canción de esta banda, en cada noche de concierto, en cada paso que dan. Es difícil de expresar, y mucho más de creer, pero ellos sí que llevan el rock & roll en las venas, y saben cómo transmitir sus emociones de la manera más certera para que las podamos recibir. No me queda más que recomendar encarecidamente escuchar este disco, con el corazón, con el sentimiento a flor de piel, y valorar en su justa medida todo su esplendor. Los que tenemos el placer de seguir su estela durante años, recibimos este disco como un premio a nuestra pasión, a nuestro anhelo de sentimientos verdaderos.
CHEMA GRANADOS