Quizá el músico más internacional de nuestro país Jorge Salan conversa con nosotros sobre la grabación de su primer DVD en directo, además de hacer interesantes reflexiones sobre su vida y obra. Guitarrista genial, curtido en mil batallas, ha pisado los escenarios de medio mundo con su música o acompañando a grandes genios como Jon Lynn Turner, Jeff Scott Soto o la incombustible Robín Beck. Músico multidisciplinar, emprendió su carrera en solitario para adentrarse en el territorio del blues, un espacio donde se encuentra a sí mismo, y donde da lo mejor de sí mismo. Su último disco “Graffire”, publicado el año pasado, ha resultado ser quizá su mejor trabajo.
¿Cuál ha sido el motivo por el que has considerado que era el momento adecuado para grabar un concierto en directo?
Pienso que para un artista es bueno grabar después de cuatro o cinco años, porque ahora mismo miro los trabajos anteriores y no veo una buena representación de lo que soy a dia de hoy. Ahora mismo estoy tocando blues, con una nueva imagen, una nueva banda, un nuevo concepto, y me pareció un muy buen momento tras editar este segundo disco “graffire” un disco de blues. Es una buena representación de lo que es mi banda y mi forma de entender la música.
¿Cómo te has planteado el show del próximo 2 de Junio? ¿Habrá un repaso de toda tu carrera desde tus inicios, o quizá solo la parte de tu carrera en solitario?
Va ser un concierto centrado en el blues rock, en estos dos últimos discos editados, “Majestic” y “Graffire”, aunque también habrá temas de mis anteriores trabajos. El show se centrara en la mayor parte en “Graffire” que es nuestro último disco, y que lo tocaremos al completo, haremos algún tema de “Madrid-Texas” y alguna versión que no están recogidas en los discos.
¿Versiones de blues clásico?
Si, de blues clásico, un tributo. Va a ser una fiesta hecha por y para el blues en recuerdo de los grandes bluesmen como Budgy Guy, B.B. King, Fredy King, va estar centrado en esto pero con mucho rock también.
¿Habrá colaboraciones, creo que hay dos confirmadas en concreto?
En realidad no son colaboraciones, el grupo que abre Red House la banda de Franciscos Simón y Jeff Espinoza, que eran un set de media hora en semi acústico, pero no son invitados. Es algo que ha quedado un poco confuso en la promo. Después nosotros estaremos algo más de dos horas. En lo que es mi show no va a ver como digo invitados va a ser un concierto centrado en Jorge Salan cien por cien.
Has estado embarcado en una gira importante.
Este concierto es el que culmina la gira. Hicimos tres semanas en Escandinavia, alrededor de quince fechas, en Finlandia, Noruega. Luego algunas fechas por Andalucía, Galicia, alrededor de veinticinco conciertos, pero no habíamos hecho Madrid asi es que un poco la presentación de “Graffire” y a la vez aprovechar para grabarlo en vivo en CD y DVD, que después de cuatro años era el momento.
Creo que “Graffire es un punto y aparte que te ha reportado una importancia superlativa. ¿Qué ha significado para ti este disco?
Es un disco muy personal porque es el primer disco de mi carrera que he grabado en mi propio estudio de grabación. El hecho de tener un estudio propio, mi propia casa, sin problema de tiempo. Siempre que vas a un estudio el problema es el dinero. Cuando tienes tu propio estudio te da tiempo a probar cosas diferentes, hacer cambios. Con mucho estrés porque se grabó en medio de tres giras mundiales, Con Scott Soto, con Joe Lynn Tuner, y entre medias de eso tenía que sacar tiempo para grabar el disco, pero luego lo compensé haciendo lo que realmente deseaba.
Y además a tu gusto y de la manera que tu querías
Eso es. Y yo creo que por eso es una de las grabaciones más importantes que yo he hecho porque es Jorge Salan cien por cien, la mezcla definitiva no la cerré hasta que no estaba todo fuera de mi cabeza.
¿Cómo se forman The Majestic Jaywalkers? ¿Es una banda sé que formó solo apta acompañar a Jorge Salan o ya estaban funcionando previamente?
Ellos llevan mucho tiempo tocando conmigo. Los músicos que grabaron el álbum porque luego en directo es otra cosa. Son Juan Carlos Gibaja, Edu Brenes que están conmigo desde el primer álbum. Lo que pasa es que no podían girar conmigo por falta de tiempo y de otros proyectos. Asi es que buscamos a dos personas para los directos, dos chavales jóvenes con muchas ganas, y ya llevamos tocando juntos alrededor de siete meses. Es un power trio pero para esta ocasión de la grabación del DVD llevaremos a Víctor Elías a los teclados. La gente le conocerá porque era actor en la serie televisiva de Los Serrano. Mucha gente le conoce como actor, y le identifica con la serie, y le choca verlo tocando tan joven, pero tiene la carrera de piano, hace jazz, puedo tocar funk, puede tocar clásico, la gente que vaya al concierto va a poder ver una muestra de su talento.
Acabas de publicar un videoclip “One More Empty Feeling” junto a Garret Wall. ¿Cómo ha sido buscar este cantante para este videoclip? ¿Tenías alguna relación previa de amistad con él?
Es curioso porque conocí a Robin Beck, y me llamó para tocar con ella en el Fire Fest de Nottingham, y me dijo, oye hay una cantante americana que también quiere que toques con ella se llama Fiona Flanagan que editó varios discos de hard rock en los 80 en Estados Unidos, y parte yo la conocía porque hizo una película de protagonista con Bob Dylan, y cuando me llamó Fiona me dijo: oye tengo un primo en España que se llama Garret y va ir contigo en el mismo avión al Fire Fest, llámale y venís juntos. Así que nos conocimos e hicimos muy buena amistad. Luego le pedí algún tema suyo porque yo necesitaba algo para mi disco que le diera un toque diferente, y me regaló este tema.
Lógicamente debía de cantarlo él.
Claro, él es cantante y compositor.
Me gustaría que me explicaras como has realizado el trasvase del rock y del heavy metal al blues, al modo de Gary Moore quien también dio un giro de timón para dedicarse al blues. ¿Ha sido por buscar nuevos caminos?
A mi el blues siempre me ha gustado. Todo lo que se engloba dentro del hard, rock y blues me ha gustado siempre. De hecho mi disco favorito de Gary Moore es “Blues Alive”. Con trece años me sacaba todos los temas de ese disco, todos los solos, y en mi casa siempre se han escuchado discos de Eric Clapton, John Mayal, y por eso me apetecía regresar a esas raíces. Quería hacer un disco en el que recalcara esta faceta mía totalmente desconocida y que no había salido a la luz. Siempre he interpretado mucho blues. Llegaba a una prueba de sonido, y aunque tocar hard rock probaba tocando blues. Y era por tanto el momento de hacer blues.
¿A partir de ahora vas a continuar por la senda del blues, o retomarás el rock más adelante?
Yo no reniego del rock. El hecho de que toque blues no significa que me olvide de ello. Sigo tocando rock con Jeff Scot Soto, metal. Sigo tocando rock cuando toco con Joe Lynn Turner y hacemos temas de Deep Purple o Rainbow. Mi faceta rockera ya la tengo cubierta por ahí. Por eso como hago tanto rock, a lo mejor el blues es como hacer algo distinto para oxigenarme.
Equilibrar un poco las dos vertientes
Exacto. Porque yo como artista soy alguien al que le gustan muchos tipos de música, soul, funk, clásica. Yo disfruto de cualquier tipo de música. Me gustaría a veces complicarme menos y ser como Angus Young y como decía él “yo hago el mismo disco durante treinta años pero con diferente portada”. Ese no es mi caso.
¿Eres un músico autodidacta o tienes formación musical?
Soy las dos cosas. Yo empecé con guitarra clásica en el conservatorio, estudiando solfeo, obras clásicas, que me vinieron muy bien como formación. Posteriormente conseguí comprar una guitarra acústica y comencé a sacarme canciones de Gary Moore de oído, sin que nadie me dijera ni como coger una púa ni una pentatónica, lo aprendí yo solo. Y después me apunté al Instituto de Música y Tecnología de Madrid que en aquella época tenía muchísimo prestigio, y luego acabé en la universidad de Barclay con una beca que me dieron en la ciudad de Boston en USA.
Existen numerosos guitarristas en el mundo, cada cual con su perfil, y la mayoría muy virtuosos y dominan la técnica maravillosamente. ¿Tú que prefieres ser un guitarrista virtuoso o tener feeling, esa capacidad de transmitir sentimientos a la hora de tocar la guitarra?
Es una pregunta compleja porque hay gente que dice: yo con dos notas soy capaz de transmitir, y ya piensan que todo el mundo que toque dos notas trasmite. Y hay músicos que tocan muy rápido y que son capaces de transmitir igualmente. Aquí se trata de tener musicalidad, y la musicalidad es un concepto que no posee todo el mundo en el término más amplio de la palabra. Por ejemplo, tú escuchas a Eric Clapton o Dave Gilmour, y Gilmour con Pink Floyd con dos notas hace un solo que lo recuerdas para toda tu vida. Y luego escuchas a Paco de Lucía, o Steve Vai y transmiten siendo muy técnicos. Gary Moore tiene muchísima técnica, de repente te toca unos desarrollos muy rápidos pero los mezcla con nuco feeling. No se trata de tocar rápido o tocar lento sino de transmitir como lo hagas pero que sea sincero, que sea sincero y que salga de ti de dentro.
Que haya un balance entre la técnica y los sentimientos
Eso es. Esta más de moda digamos criticar al que toca rápido y decir que no tiene feeling, pero a veces hay músicos que dicen: yo con dos notas transmito y a lo mejor no es tan fácil tampoco. Para mi es una mezcla de todo, la técnica desde luego no es solo tocar rápido, o solo tener un buen vibrato, o un buen vending. Elegir la nota correcta también es técnica. Yo creo que una mezcla de todo es lo que hace ser un buen guitarra.
Desde hace algunos años tú te has caracterizado por ser un músico español que ha traspasado fronteras. ¿Qué sentimientos te suscita el hecho de verte tocando en grandes festivales junto a artistas de renombre internacional con respecto a tus compañeros aquí en España? ¿Es una cuestión de suerte o de trabajo?
En realidad tengo suerte de tener gente trabajando para que yo pueda conseguir hacer realidad mis sueños. A mí se me han cumplido muchos y se me siguen cumpliendo. Pero también es cierto que yo la suerte la provoco. Por todo el trabajo realizado. Evidentemente hay un punto de suerte en todo lo que hago, pero desde luego yo no he sido una persona que me haya quedado en el sillón de mi casa. Yo sé lo que es poner dinero para grabarte tus discos, se lo que es ir a tocar para diez personas y palmar 600 euros. Todas esas cosas que saben los músicos de rock & roll que están en la carretera. Se lo que es todo eso porque lo he vivido. Nadie te garantiza un resultado final cuando apuestas. Desde luego yo he apostado y muchas veces me ha salido bien.
Ya en los tiempos de tu paso por Mago de Öz comenzaste a ver un poco de color, por decirlo de alguna manera…
Eso es. Pero por ejemplo yo estaba en una banda en la que me encontraba muy bien, tenía veinticuatro o veinticinco años, ganaba dinero, me iba todo muy bien, y decidí buscar un camino que era más bien muy propio camino. Estaba muy bien en la banda, aprendí mucho, viajé mogollón por toda Europa, hice conciertos en sitios increíbles como en Las Ventas, experiencias que con esa edad nunca podré olvidar. Pero era consciente que ese cambio tenía que hacerse con mi música. Lo que yo hago en mis discos en solitario. Con Mago de Öz nunca podría haberlo hecho. Lo que quiero decir con esto es que seguí apostando y seguir arriesgando para buscar mi propio camino. Y eso es al fin y al cabo, lo que te lleva a que te pasen cosas. Unas cosas u otras.
Con respecto a otros estilos musicales como el blues o soul por poner un ejemplo, el rock está tocado por una especie de maldición, u sobre todo en este país. Ahora que estás haciendo blues se te están abriendo muchas puertas, y estas teniendo muchas más oportunidades que si tuvieras una banda de hard rock por ejemplo, y cantando en castellano, y trabajando el circuito español. ¿Por qué crees que ocurre esto? ¿Por qué esta tan maldito el rock en nuestro país?
Bueno en este país están malditas demasiadas cosas, no solo el rock. El teatro, el cine, es la cultura en general. La verdad es que vas a un centro cultural de un ayuntamiento y les propones que contraten a tu banda de blues, y la palabra blues es como que entra enseguida, y la palabra hard rock ya no suena igual para el área de cultura de un ayuntamiento.
Y quizá piensan que el público que va a ocupar el asiento en ese concierto es más “normal” entre comillas…
Puede ser. El rock todavía tiene que transcender a ese nivel en que se le considere cultura total. Le quedan unos años. El blues a lo mejor tiene treinta años más digamos, y yo creo que al rock le falta eso, treinta años más para que al final, vayas a un centro cultural y no te miren mal si propones un grupo de rock
¿No será que somos un poco sectarios y nos encerramos en nuestro propio territorio sin querer plantear nuestra música de manera que pueda llegar a más gente, que la pueda entender más gente? Que hay miedo a que te tachen de comercialidad. De que te has vendido.
Eso yo no sé de donde sale, porque en general lo dice gente de los 70 y 80 cuando el rock vendía millones de discos y era comercial. Tu escuchas “Aware Now” de Queen y es un tema comercial, o un tema como “Here I Go Again” de Whitesnake y es muy comercial. ¿Qué pasa que es malo? ¿Qué no tiene musicazos interpretando?
Al fin y al cabo, lo que desea cualquier artista es vender muchos discos y llegar al mayo público posible…
Exactamente.
¿Qué consejo les darías a los guitarristas que lean esta entrevista, y que están luchando por hacerse un nombre en el panorama musical de nuestro país?
Sobre todo que crean en ellos mismos. Es el ejemplo que te comentaba. Mucha gente, antes de la crisis económica y todo esto. Han dejado de estudiar lo que ellos querían por tener un trabajo mejor, y luego con la crisis llegó toda esta mierda que vivimos ahora y se vieron en la calle. No tienes ni el curro que te gusta ni nada. Y lo que nunca nadie te puede quitar es luchar por tus sueños, y por lo que a ti te motiva. No dejes nunca de luchar por lo que tú quieres. Al fin y al cabo cuando tú eres tu propio jefe entre comillas, aunque tengas muchos quebraderos de cabeza, igual que cualquiera que tenga un bar por ejemplo, y tiene que comerse muchos marrones. Pues esto igual, cuando trabajas para la música por ti mismo también te comes muchos marrones, pero la satisfacción que te da el hacer lo que te gusta es algo que nadie te puede arrebatar.
Y trabajo y constancia, sin parar…
Trabajo, constancia y tener claro lo que de verdad quieres.
Conozco muchos guitarristas excelentes en este país, que llevan mogollón de años en el tema, peleando, y ven que no van a ninguna parte, que no se les valora convenientemente, y esto produce un desgaste increíble.
Si es verdad, pero el tema es seguir luchando. Enfocar tu camino. Recorrer un camino que es lo que pasa, que hay muchas rotondas con muchas salidas y muchas entradas, pero tienes que saber dónde vas. Con la música es lo mismo. Hay muchas salidas en el camino… formas de salir y de entrar, pero para no perderse ahí tienes que enfocar una meta. Quiero ser un guitarrista que acompañe a otros artistas, quiero ser un guitarrista que haga su propia música… enfocar el objetivo. Y luchar por ello.
¿En qué momento de tu vida sentiste que querías ser guitarrista?
Desde siempre. Cuando tenía ocho años vi la película “Cruce De Caminos” y fue como una señal. Fue una revelación. Fue así. Imagínate que es lo que tiene la mente de un chaval de ocho años. No eres nada. Pero yo lo vi claro, lo recuerdo así. Quiero Ser guitarrista. Lo vi tan claro que desde entonces se convirtió en mi pasión y mi trabajo.
Después de dedicaste a llevar adelante esa afición…
Yo vi la película y al mes siguiente ya estaba tocando la guitarra en el conservatorio. Fue tan rápido, que dije quiero esto, y me puse a tocar. Hablé con mi familia y les dije que me apuntaran a clases de guitarra que eso es lo que quiero hacer en la vida. Y desde ahí, fue el comienzo.
Por último, el tema inevitable. Acabas de entrar a formar parte de la banda All Stars de Avalanch. ¿Cómo ha sido tu ingreso en Avalanch?
Me encontraba en la semana de nochebuena. Esa semana que todo el mundo anda con las cenas de empresa, con amigos, y pensé “esta semana nadie me va a llamar para trabajar” y justo me llamó Alberto Rionda y me comentó el proyecto y me propuso participar. Y yo dije, allá vamos. Alberto Rionda para mí ha sido un músico que dese que yo tenía catorce o quince años era admirado, sobre todo cuando publicaron “El Llanto De Un Héroe”.
¿Crees que será un proyecto con continuidad o se quedará en la reedición de “El Ángel Caído?
Sí, yo creo que va a haber más discos. Acabamos de empezar el proyecto. Hemos hecho un Viña Rock que es el único concierto que hicimos. Ahora grabamos DVD en la sala La Rivera de Madrid el día 17 de Junio, y tenemos mucho que hacer con este trabajo. Ir conociéndonos. Cuando se acabe la presentación del “El Ángel Caído” empezaremos a componer temas propios.
Me imagino que lo puedes compatibilizar con tu carrera
Si claro, cuando estás en un proyecto como este somos músicos profesionales y cada uno tiene sus proyectos, imagínate Mike Terrana que cuando no está con otros proyectos, esta con Masterplan, o sino haciendo una gira con clinics. Yo estoy con Soto, Lyn Turner y mis discos, Magnus tiene proyectos también…
Hoy en día con mandaros los audios…
Eso es, ya no es como antes. Ahora se funciona de otra manera, y sobre todo en la música hoy en día tienes que estar en muchas cosas. Todo el mundo se guarda el tiempo necesario para Avalanch.
¿Os reunís para ensayar?
Hacemos muchos deberes en casa. Alberto manda las pistas, y lo deja todo muy claro como productor musical. Y cuando ha habido algún ensayo puntual no es para aprender las canciones, es para retocarlas. Ya previamente ha habido un trabajo por internet
CHEMA GRANADOS
FOTOGRAFIA: GUITAR CALAVERA / REDHARDNHEAVY.COM