LA SONRISA REFULGENTE
Neus Ferri es una artista que te envuelve con su encanto, transmitiéndote de inmediato toda esa energía desbordante que expele con total naturalidad. Una artista que trasmite las emociones que le brotan de su interior sin pudor alguno. Esa autenticidad emana del centro neurálgico de su alma, y es captada por el espectador atrapado en esa red de simpatía, una voz única cargada de pasión, y una sonrisa refulgente que no se diluye hasta que no cae el telón. Toda ese compendio de encantos, se apoya en unas canciones que contienen lo mejor de la música contemporánea, intimistas, y cuyas letras reflejan lo mejor de sí misma. No tiene dobleces. Al menos de cara al que recibe esa pléyade de sentimientos. Por ello, cada vez que estas ante ella, presencias una experiencia vivificante. Canciones revestidas de pop multicolor y una base rock elegante que se trenza en una malla de la que es imposible escapar. Y lo más importante, que crece a cada paso haciéndose cada vez más grande, sino para el gran público aún, si para los incondicionales que asisten a esta bacanal de sentimientos con emoción renovada. Su carrera, jalonada por créditos espirituales y mucha sinceridad, marcha a buen paso, poco a poco, ascendiendo cada peldaño con responsabilidad, con la pasión de sus textos rebosantes de poesía e intimidad. En los tiempos que corren, es más que suficiente para ganarse al menos la satisfacción de hacer feliz a la gente que la aclama. Los laureles de la fama llegarán, o no, nunca se sabe, pero al menos, quedará el testimonio de estas canciones increíbles, que ya son imperecederas. Quizá poco importe la fama y el oropel consiguiente si se consigue emocionar, al fin y al cabo, ese es el sueño de cualquier artista, llegar a transmitir y conectar con el público.
Desde su participación en el reality televisivo “La Voz” ha ido construyendo su carrera a base de esfuerzo, trabajo denodado y esa ilusión férrea que la hace desvivirse por la música y por su arte. Su nuevo trabajo “Aquí Me Tienes” es un cántico a sus inquietudes interiores, dejando entrever en cada compás y cada acorde la esencia de su autenticidad. Sin sombras ni recovecos. La producción de su nuevo disco recalca esto mismo, con un sonido poderoso, un trabajo en estudio impecable y una visión musical vanguardista y muy personal. El pasado 22 de Febrero presentaba este nuevo trabajo en la mítica Sala Siroco de Madrid que se quedó pequeña para recibir el regalo de su música. Estuvo apoyada por una banda de lujo: Isi Ruiz, a la guitarra, José de Castro (Jopi) a la guitarra, Pau Álvarez a los teclados, Marco Niemietz al bajo y Matt de Vallejo a la batería. Un quinteto de grandes músicos, bregados en mil batallas que sonaron impolutos. En directo, los temas resultaron mucho más contundentes que en el disco, con mucho más punch, brillantes y cargados de potencia. Con la sala repleta los acordes de “Mi Parte”, el corte que abre su nuevo disco, comenzaron a sonar y el público recibió a Neus Ferri con fervor. De inmediato gobernó el escenario con autoridad, emoción, y esa alegría copiosa que la caracteriza, haciendo gala de una gestualidad emocionada, que apoya los textos y las melodías, y esa voz impresionante que sabe encauzar para que el resultado sea esplendoroso. La sala vibrando, colmada de almas extenuadas por el entusiasmo, y la banda, sonando como un cañonazo. Prosiguió con “Devuélveme El Aire”, un tema intenso con una letra profunda cuyos versos son imposibles de olvidar: “…Devuélveme el aire / dime dónde encontrarte / que me he convertido en hielo / esperando el invierno / de tanto jugar con fuego / me ha quemado el incendio…” y a reglón seguido “Solo Una Mujer”, “No Te Alejes”, “Tu Sitio”, “Invasivo”, “Salir Corriendo”, “De Noche” y “Pasatiempos”. Llegado este momento subió al escenario Kake Caskärrabias, el alma mater de una de las bandas legendarias de rock de Madrid, Caskärrabias, para interpretar una de sus canciones más emblemáticas del grupo “Madrid”, todo un himno, y para muchos de nosotros una canción que nos acompañará toda la vida. Mucho feeling entre ambos, lo que generó una magia especial. En el tramo final “Salvaje”, “Personal”, “Aguardiente”, “Aquí Me tienes” y “Contigo” momento en el que la banda abandona el escenario. Para los bises, “La Última Batalla” y el incombustible “Rock & Roll”. Terminaba el show y el aire sabía a delicia, el corazón en un puño, y la sensación de que la vida te premia con la música, la música de una artista que siempre viaja al centro de tu espíritu. Mejor sensación no puede sentirse, en un mundo cuajado de zafiedad e ignominia. Mejor elixir para alucinar, imposible. Otra noche más para no olvidar, para mantener en la memoria viva. Neus Ferri prosigue su camino dejando una estela de magia y belleza tras de sí. La próxima cita en Abril en la Sala Costello.
CHEMA GRANADOS