TSUNAMI FUCSIA
Megara es un tsunami. En mi opinión, no hay mejor manera de describirlo. Un tsunami cargado de emociones diversas, coloristas, imaginativas, ambiguas… Un vendaval imparable cuando suenan los primeros acordes, y un torrente prolongado de sensaciones visuales que acaban por adentrarnos en un mundo creado por ellos mismos, y del cual no queremos escapar. Nadie como esta banda ha sabido entender la esencia del rock, aquella que aúna la potencia musical con el espectáculo. Porque ambas cuestiones se basan en la reciprocidad mutua, ambas se retroalimentan entre sí. Y ellos lo han entendido muy bien. Así es que el espectáculo de Megara va más allá de los discos, de los convencionalismos tediosos, está también en la forma en que se comunican con sus fans, haciéndoles participes de sus fantasías, manejando las redes sociales con brillantez, dándoles todo aquello que precisan, y sobre todo, por su actitud en escena, enérgica, intencionadamente combativa, con un show visual que tiene mucho que ver como complemento de la música, que finalmente, engrandece el resultado final. Muchos meses de preparación para que el día del estreno todo funcionara correctamente. Y funcionó. Todo ese esfuerzo y esa ilusión amalgamadas, dieron como fruto un concierto memorable que marcará un antes y un después en la historia de la banda. Presentaron su último disco “Aquí Estamos Todos Locos”, y para dotarle de un espacio y de un escenario que explicase la música, recurrieron a Lewis Carrol y a su obra “Alicia En El País De Las Maravillas”. Pero claro, pasado por el tamiz de la creatividad de la propia banda. Ya en acceso principal al recinto, una gran pancarta anunciaba la entrada al país extraño y divergente, un país de maravillas donde la imaginación era el detonante. No les falto detalle, porque la jornada empezó con un Tea Party particular para VIPS, una especie de yincana con pistas por todo el local, personajes caracterizados por entre el público, y un montaje muy bien estudiado.
Tras los compases iniciales de “Esclava Del Aire” el escenario se convirtió en un hervidero. Todos los miembros del grupo se afanaron por entrar en una especie de estado catatónico desbordante de actitud. Kenzy es una diabla en escena. Su magnífica voz se potencia gracias a su expresividad y sus movimientos. Pol DQ machando los parches de la batería con potencia, mientras Robe y Pablo echan todo el resto para que suene como un cañonazo. Seguidamente “Enredados” otro de los temas del nuevo disco, y a reglón seguido gran descarga con “Vivo De Rodillas” Involución”, “El Hombre De Arena”, Cuenta Atrás” , “Alas” (Versión de “Birdy”) y “Make Me Wanna Die” (versión de The Pretty Reckless) Espectacular. Con el tema siguiente, “Arrástrame Al Infierno” pudimos ver la primera performance de la noche con bailarines en escena. Sirvieron como apoyo escénico a Kenzy que interactuó con ellos con mucho arte. Después de un solo de batería increíble de Pol DQ, entramos en el último tramo del set list con una versión de “Billie Jean” de Michael Jackson muy particular, “Más Que Una Leyenda”, “Almas”, “Héroes”, “Seis”, y como traca final, “Bienvenidos Al Desastre” con el teatro a punto de hundirse. Cae el telón, y del fondo del teatro surgen los personajes que participaron en su videoclip. Se abre el telón, y aparece una mesa alargada preparada para una especie de cena siniestra que acaba en bacanal. Memorable. Megara hicieron el primer Sold Out de su historia dejando patente su carácter y su manera de entender el rock desde su mirada contemporánea, imaginativa y creativa en su máximo exponente. Todo un gran trabajo de producción, de inventiva, de energía, que ha dado como resultado a uno de los grandes espectáculos de rock y metal de nuestro país. A buen seguro, continuaran ofreciendo sorpresas, creciendo día a día, y dejando patente la esperanza de que las nuevas generaciones de músicos que ellos representan, están llamadas a hacer cosas muy grandes.
CHEMA GRANADOS