EL MUNDO INSÓLITO DE LA AMBIGÜEDAD
Megara ha entendido muy bien cuál es su camino, y quizá, cuál es su destino. Intuyen el aroma intenso del éxito, con un olfato súper desarrollado. Tienen instinto, y saben por dónde tienen que pisar. Han entendido a la perfección que el público quiere propuestas diferentes, que deben mostrarse como son, ser auténticos y fieles a su destino. Por eso, Megara desplegó todo su potencial creativo, para que el concierto de presentación de su nuevo disco resultase ser una experiencia inédita en nuestro país, donde conviva el metal y el rock más alternativo, con el desarrollo de todo un discurso teatral inspirado en la creatividad, en mundos paralelos cargados de ambigüedad, de pecado, de sexualidad inducida, de infiernos y de cielos que se convierten en paraísos góticos de placer y de dolor. Un ingente trabajo de producción que resultó intachable. Sala VIP y de prensa donde poder degustar un suculento sushi servido en cuerpo de una bella doncella, catering, y zona de fotógrafos. Photocall, y sugerentes diablas repartiendo obsequios entre los asistentes. Un trato exquisito a los compañeros de prensa, ofreciéndonos todo tipo de facilidades para desarrollar nuestro trabajo. Una pasada. Todos estos detalles, sumado a un show donde interactúan con su público, donde se sumergen en sus propios fantasmas, y donde despliegan todos los mundos extraños por donde se mueven. Mundo de Oscuridad, de Infierno y de limbo. Un show perfectamente diseñado para hacer gozar al personal. Abrieron con el tema que abre su disco “Atajo Al Cielo”. Con acordes sinuosos, y luces siniestras. Aparecen en el escenario. Sus rostros, cubiertos por una máscara blanca. Y luego, aparece en escena la vocalista vestida con una capa, embozada en su capucha. Tiembla a luz del escenario, y entre cortinas de humo, los desgarradores acordes del tema dan fuerza a la descarga. Siguen con “En Llamas” también de su último disco, “Sweet Things” un cover de The Pretty Reckless”, “Vivo De Rodillas” “Alas” y “Fiel A Nada”. Imponentes, dominando la escena con autoridad. Kenzy es una vocalista que controla el show con naturalidad. Expresa con su cuerpo, se desvanece entre el humo, y surge como una centella, siempre apoyado por la contundencia de la base rítmica de Pol a la batería y Pablo al bajo, y la guitarra corrosiva de Rober. En adelante el set list iba a ir mucho más arriba con “I Kissed A Girl” un cover de Katy Perry, “Equilibrio”, “Baños De Sangre”, “Sin Ti” y Héroes”. Entretanto, un espectáculo cargado de efectos, gogos, ejercido de lesbianismo, y mucho metal melódico. Un mundo de ambigüedad delicioso con enorme intensidad. Terminaron con otro cover “How Does It Feel”, y para rematar la faena “Seis” con Kenzy navegando sobre el público montada en un unicornio inflable, globos y descargas de confeti. Una fiesta de recursos grandilocuentes que ofrecieron una imagen de banda profesional y fuerte. El futuro que les depara por tanto, es inmejorable. Han entendido muy bien cómo funciona este negocio, como ganarse a su gente, como potenciar los detalles para hacer que su imagen, y su trabajo, sean inolvidables.
TEXTO Y REPORTAJE GRÁFICO: CHEMA GRANADOS